En Charleville, una pequeña ciudad del norte de Francia en 1854, nace Arthur Rimbaud uno de los máximos representantes del simbolismo, quien inspirado profundamente en las lecturas de ocultismo y su preocupación religiosa de Baudelaire, Arthur empezó a escribir versos desde los 10 años, aprovechándose de su capacidad intelectual muy alta y de su extraordinario talento sobre la literatura, Rimbaud a sus 16 años escribe un poema sorprendentemente extraordinario para su corta edad titulado “El Barco ebrio”(1871), cuyo trabajo literario se lo envía al poeta Paul Verlaine, quien sorprendido por la poesía del joven poeta, lo invita a viajar a Paris pagándole el pasaje de tren y alojándole en su casa donde vivía con su esposa y sus suegros.
Llega Rimbaud y se presenta en la casa de Verlaine un tanto sucio y descuidado, inmediatamente es rechazado y mal visto por la familia de la esposa de Verlaine, pero no por este, pues al conocer que el poeta era bastante precoz para tan magnífico trabajo literario, queda completamente deslumbrado y después de que Rimbaud decide abandonar la casa de Verlaine, el poeta decide buscarlo y lo aloja en la casa de unos amigos mientras logra encontrar una habitación para alquilar.
Desde ese entonces entre ellos nace una profunda amistad que poco a poco se transformo en una tormentosa e inestable relación amorosa, donde los dos experimentaban constantes estados de ebriedad y drogadicción con el objetivo de buscar paraísos artificiales donde no importaban nadie más que los dos.
Pero por otro lado Verlaine mantenía una vida paralela a la que mantenía con Rimbaud, que era con su esposa Mathilde y su hijo, la misma que era víctima de los innumerables actos de violencia y desenfreno de su esposo, quien cada vez que regresaba embriagado la golpeaba, hasta llegar a cierta ocasión de prenderle fuego al cabello de Mathilde, acto que no llego a consumirse del todo porque el fosforó se apago antes de que ardieran muchos más mechones.
Aunque parezca un poco descabellada la idea Verlaine tenía la necesidad de tenerlos tanto a Rimbaud como a Mathilde a su lado, no podía prescindir de ninguno de los dos, pues quizás el poeta sentía la necesidad de desfogar con su esposa la brutalidad que era sometido con el joven Rimbaud.
Entre 1872-1873, Verlaine y Rimbaud deciden trasladarse a Inglaterra y a Bélgica, en este último lugar Verlaine intenta matar dos veces a Rimbaud por un ataque de celos por supuestas infidelidades por parte del joven poeta. Luego de esto, Rimbaud retorna a la granja de su familia en Roche con la muñeca herida por el impacto de la bala que le propinó Verlaine, después de recuperarse, escribió “Una temporada en el Infierno”, su poemario más famoso, el joven poeta decide llevar algunos ejemplares a Paris, pero su trabajo no es bien acogido entre los círculos literarios parisinos, por lo que este hecho le obliga a Rimbaud a regresar a Charleville y bote todo su material al fuego, a partir de este hecho Rimbaud entre 1873 y 1875 decide abandonar definitivamente la literatura con apenas 20 años de edad.
En 1874 Rimbaud decide emprender una vida nómada y de vagabundeo que lo lleva a recorrer Europa, África y las Indias Orientales, desde se desempeña en diferentes tareas se enlista en la armada colonial holandesa, deserta, trabaja como capataz, etc. en todos estos sitios padece hambre y penurias. En 1880, trabaja con un comerciante de café, es enviado a Etiopía, donde fue el primer hombre blanco que pisó esas tierras. También fue traficante de armas y tratante de esclavos. Durante su exilio, Rimbaud comenzó a tomar fama en Francia, gracias a que Verlaine escribiera sobre él en “Los poetas malditos” (1884), y publicado una selección de sus poemas que fueron acogidos con éxito.
En 1886, publican “Iluminaciones”, poemas en prosa, que Verlaine presentó como el último trabajo de Rimbaud, pensando que había muerto. En febrero de 1891, Rimbaud enferma de un tumor en la rodilla, y debió vender sus propiedades en Etiopía, para poder viajar a Francia para ser atendido. Al poco tiempo de su arribo a su tierra, debieron amputarle la pierna derecha. Retornó a la granja de su familia, donde fue atendido y cuidado por su hermana Isabelle. Rimbaud sabía que su muerte estaba cerca, por lo que un día antes de su fallecimiento el poeta un tanto inconsciente por su enfermedad, decide dictar una carta a su hermana Isabelle, dirigida a una compañía naviera donde decía: “Me hallo enteramente paralizado y desearía por ello subir pronto a bordo. Tengan a bien comunicarme a qué hora se me podrá embarcar”.
El 10 de noviembre de 1891 muere Rimbaud sin siquiera haber cumplido los treinta y siete años. Lo enterraron en su tan detestada aldea de Charleville, sin mayores honores ni discursos.
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